Al tiempo de partir ¿qué podemos decir? Se agolpan tantas cosas en la memoria y el corazón que no sabemos expresar… Quizás solo nos queda la sencilla palabra que puede abrazarlo todo: ¡GRACIAS!
Gracias a Dios que nos ha hecho volver a experimentar en el encuentro con vosotras que, venciendo distancias, superando fronteras de culturas, lenguas, etc. Él puede formar una “nueva familia”… Que al encontrarnos por primera vez podemos experimentar que encontramos a un “hermano”, que desde el silencio de Dios se va realizando la “Nueva Creación”.