Jesús Resucitado quiere hacerse presente en nuestra vida cotidiana y se muestra a ella con un resplandor deslumbrante. Se volvió y vio a Jesús que estaba allí, pero no sabía que era Jesús. Jesús le dijo: ¿A quién buscas? Ella, pensando que era un desconocido, le dijo: busco a mi Señor. Jesús le dijo: ¡Chusina! Ella, volviéndose, le dice ¡Maestro! y comenzaron a caminar juntos… ¡Ella tenía prisa por celebrar el banquete pascual!