UN CAMINO A RECORRER…
Es indudable que cada día tiene su afán, pero también es cierto que a veces hay que sentarse a la ladera del camino… buscar una sombrita y releer los pasos recorridos.
Nuestras instituciones también necesitan de todo esto. Y seguramente es quizá una de las razones por las que existen nuestros CAPÍTULOS PROVINCIALES. El paso del tiempo hace que el polvo se pegue a los pies y hay que coger energías y un sorbo de agua fresca para continuar.
Esta es la primera fase que compone el capítulo. En unos días de reflexión tomamos pulso al aquí y ahora, hacemos pie en la realidad, pedimos ayuda al Señor y con ánimo confiado comenzamos nuestros trabajos capitulares con sus itinerarios bien marcados en nuestras normas.
Esperamos que el aire saludable del Espíritu renueve nuestro interior y nos dé claridad para afrontar nuestra vida e impulsar nuestra misión evangelizadora.
Que María, madre siempre atenta, acompañe nuestros pasos en ese seguimiento fiel a su Hijo.
¡BUEN TRABAJO!