En esta historia de 800 años nos hemos encontrado con artistas, evangelizadores, misioneros, estudiosos, papas, profetas, místicos, mártires, defensores de la justicia, creadores, comunicadores, premios Nobel de la Paz o de Literatura, padres y madres de familia, educadores y gente sencilla, pero extraordinaria, que día a día han entregado y siguen entregando hoy lo mejor de sí mismos por vocación.